Tras dos años de eventos virtuales, nuestros estudiantes estaban preparados para vivir de nuevo el encierro en persona.

El encierro es algo más que una fiesta nocturna con amigos: proporciona un tiempo significativo para centrarse en el bienestar espiritual, social y emocional de los alumnos.

“Al igual que al resto de la población, la pandemia ha hecho mella en la salud de nuestros estudiantes, incluida su salud mental”, afirma Cynthia. “En KidWorks, nos esforzamos por ofrecer a nuestros alumnos espacios en los que puedan hacer preguntas profundas sobre cualquier cosa con la que puedan estar luchando, validar esas preocupaciones, escucharlas y comprenderlas, y valorarlas como los individuos únicos que son. El encierro fue una oportunidad así”.

Uno de los momentos culminantes de la velada fue la charla de Benjamín Juárez, pastor de la iglesia Newsong de Santa Ana.

El tema del pastor Benjamin fue “Dios está con nosotros y vela por nosotros”.

Basó su discurso en el versículo 28:15 del Génesis de la Biblia: “Yo estoy contigo y velaré por ti dondequiera que vayas, y te haré volver a esta tierra. No te dejaré hasta que haya cumplido lo que te he prometido”.

El pastor Benjamin dice: “Como antiguo pastor de jóvenes y alguien que creció en circunstancias muy similares a las de estos jóvenes, es difícil no volver y animar a los estudiantes. Con todas las voces que nuestros jóvenes oyen constantemente, es un honor que me escuchen. Les respeto y les trato como las personas brillantes que son”.

Como parte del aspecto religioso del encierro juvenil, los adolescentes crearon una sala de oración privada en un aula de KidWorks, donde presentaron peticiones de oración por escrito. También participaron en un tiempo de oración individual con los miembros del equipo de Newsong Charius You y Jason Park.

También hubo una mesa redonda sobre salud mental en la que los estudiantes pudieron hacer preguntas anónimas al personal, a un especialista en salud mental y a otras organizaciones locales sin ánimo de lucro.

Entre las divertidas actividades del encierro había salas de videojuegos, un spa, deportes y arte, además de una pista de baile con un DJ presencial, Eduardo Iniestra (“DJ Kaboom”), de Scape Music Events.

Agradecemos a Chick-fil-A la donación de 140 deliciosos sándwiches, que disfrutaron los estudiantes, el personal y los voluntarios. El personal de KidWorks, Jessica Ellis, Directora del Centro Dan Donahue y Jacky Hernandez, Asistente de Programa/Líder de Programa, prepararon mini corndogs, conos de nieve y esquites, un popular aperitivo mexicano a base de maíz.

KidWorks también agradece al Equipo de Liderazgo Juvenil de KidWorks (YLT), que ayudó con el montaje, la decoración y la dirección de los eventos de la noche. Eran excepcionales.

“YLT comenzó a prepararse para el Lock-in desde diciembre de 2021”, dice María Ruvalcaba, nuestra Coordinadora de Desarrollo de Liderazgo Juvenil. “Incluso en los días libres en que no había programas extraescolares y durante las vacaciones de invierno, el equipo trabajó en los carteles y la decoración”.

Añade María: “A pesar de tener pequeños contratiempos -como que los carteles se cayeran, se rompieran y hubiera que volver a pegarlos-, los jóvenes sonreían de emoción y expectación ante su acontecimiento más querido.”

Los miembros de YLT también recibieron el apoyo de jóvenes de nuestros centros Cedar Evergreen y Townsend, junto con jóvenes del Programa de Liderazgo Ignite.

“En última instancia, nuestro objetivo es capacitar a los jóvenes para que crean en su creatividad y sus capacidades y vean el fruto de su trabajo exhibido en su evento favorito”, afirma María.

Otro grupo, los Jóvenes Profesionales de KidWorks, colaboró en las sesiones de trabajo y prestó asistencia durante todo el acto.

Bobby Cerda, voluntario por primera vez, dijo: “¡Me pareció una mezcla perfecta de pasión y diversión! Los voluntarios de KidWorks realmente quieren cambiar la vida de estos niños y, al mismo tiempo, ¡dejarles ser niños! Un entorno estupendo, gente estupenda”.

Melissa Ley, copresidenta de la red de jóvenes profesionales, afirma: “El Lock-In es un momento culminante para nuestros jóvenes profesionales; como voluntaria es a la vez estimulante y agotador, pero yo no me lo perdería”.

“Estoy muy agradecida por la colaboración de todos los departamentos que se han unido para apoyar a nuestros jóvenes estudiantes”, afirma Cynthia.

El encierro de 2022 fue sin duda la clave de una velada que nuestros alumnos, invitados, personal y voluntarios atesorarán siempre.

Por Glenn Leibowitz, escritor voluntario

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